NUEVAS TECNOLOGÍAS
La informática es actualmente una herramienta imprescindible. No hace mucho aparecía un breve reportaje en TV donde se indicaba que la gente joven cuidaba su imagen a través del vestido, del peinado y del móvil. Nos resulta ya muy difícil imaginarnos sin ordenadores, sin pantallas, sin móviles y sin Internet.
Esta generalización de la informática en nuestras vidas ha supuesto algunos cambios en la comunicación entre las personas y en el tipo de lenguaje que utilizamos en estas comunicaciones. Así, el estilo comunicativo de los mensajes de móviles, chats y correos electrónicos tiende a ser rápido, con frases mal construidas gramaticalmente, lleno de abreviaturas, casi como un código, de manera que la rapidez en la interacción y la posibilidad de comunicarnos al mismo tiempo con muchísimas personas en cualquier tiempo y lugar (que sería el aspecto positivo), tiene como contrapartida la pérdida de riqueza en la expresión escrita y el escaso cuidado en la comunicación.
El estilo comunicativo utilizado en las nuevas tecnologías es muy diferente al estilo de otras expresiones escritas.
Fuente: Banco de imágenes del CNICE
En los espacios educativos, el uso de los ordenadores tiene claras ventajas en cuanto a la presentación de contenidos, posibilidad de plantear juegos educativos, realizar actividades de modo conjunto, aprender a través de la imagen, etc. Pero al mismo tiempo la presencia permanente en el aula de los ordenadores dificulta en gran medida la interacción entre el alumnado, así como la realización de otro tipo de tareas que necesitan de un espacio cómodo en el aula. Por ello, a la hora de plantear el uso de las nuevas tecnologías es importante actuar con cautela, de manera que la informática no acapare, con sus instrumentos y sus contenidos todo el espacio educativo.
Los datos del Instituto de la Mujer nos hablan de un uso diferente de las nuevas tecnologías en hombres y en mujeres. En España, en el año 2000, los datos de hombres usuarios de la red giraba en torno al 62%, mientras que las mujeres eran un 38%; en el año 2007, el porcentaje de mujeres era de 41% y el de hombres de 59%. (http://www.mtas.es/mujer/mujeres/cifras/tablas/Wmedios1.XLS).
Sin embargo también hay una importante diferencia en cuanto a los contenidos a los que acceden, ya sea mediante la red, ya sea mediante los videojuegos, de manera que se hace necesario que tanto desde las familias como desde la escuela se tengan en cuenta una serie de criterios para educar en un uso adecuado y crítico de los contenidos que chicas y chicos manejan a través de las nuevas tecnologías. Más concretamente:
- Es habitual apreciar un vocabulario sexista en muchas páginas, y en gran número de ellas aparece silenciado el femenino. Incluso en los procesadores de texto que habitualmente se utilizan es habitual encontrar que muchas palabras que utilizamos habitualmente para designar actividades realizadas por mujeres, no aparecen en sus diccionarios y el corrector automático del texto “nos avisa” del supuesto error. Iniciativas interesantes son las aportadas por documentos como nombra.en.red, que es una propuesta para instalar en el ordenador y a través de la cual podemos corregir fácilmente usos sexistas de la lengua, ofreciendo alternativas de redacción y expresiones con las que poder sustituir otras sexistas o androcéntricas. El documento parte de la dificultad que todas las personas tenemos para crear formas de expresión diferentes a las aprendidas y por ello han ido recogiendo en una base de datos diferentes opciones que han sido utilizadas y desarrolladas, sobre todo por mujeres.
- Una utilización adecuada de la red tendría que incluir un aprendizaje que permitiera a usuarios y usuarias una navegación con criterio para decidir acerca de la utilización o no de determinadas páginas de contenidos sexistas, pornográficos, comerciales... y en definitiva para saber decidir si cada una de las páginas visitadas es “basura informática” o se ajusta a unas claves de calidad. Si no, la red se convierte en un medio más de manipulación, difusión y afianzamiento de contenidos sexistas.
- Al mismo tiempo la red constituye una plataforma de posibilidades para entrar en relación con otras personas, transmitir ideas, debatir puntos de vista; es una herramienta útil siempre y cuando se tengan en cuenta también sus límites, por ejemplo que aún siendo una herramienta que acerca, no sustituye la presencia de otras personas ni tiene la riqueza, la emotividad o el contacto de las relaciones cara a cara.
Para saber más…. Nombra en red.
Fuente: Instituto de la Mujer (2006)