LA REALIDAD NO ES NEUTRA
Las cosas que ocurren a nuestro alrededor son las cosas que ocurren sin más. Sin embargo, la forma en la que cada cual las narra y las interpreta varía. Asimismo, la realidad afecta de forma diversa a cada ser humano.
Imagina que desde el centro educativo envías una carta a las familias para participar en una reunión de aula. Entre quienes reciben esta carta, habrá quienes ni la consideren, quienes piensen que tienen otras cosas que hacer y les será imposible ir y quienes busquen un hueco para poder asistir a la reunión.
Hay aspectos de la realidad que afectan de forma muy distinta a los hombres y a las mujeres y por eso es importante que unas y otros hablemos de cómo nos afectan las cosas y cómo interpretamos lo que ocurre. Si observamos minuciosamente nos daremos cuenta de que más allá de las diferencias individuales y de la singularidad de cada persona, hay cuestiones que afectan de manera muy distinta al hecho de ser hombre o de ser mujer.
Algunos ejemplos para empezar a pensar sobre ello serían los siguientes:
- En un colegio el profesorado cuenta que en el inicio de curso la reacción del alumnado es diferente cuando quien imparte la clase es un profesor o una profesora. El alumnado no se porta de igual manera y, en ocasiones, ellas tienen más dificultades para hacerse con la clase. Cuando lo comentan con otros compañeros a veces ellos les dicen que tienen que utilizar un lenguaje más severo y no ser tan suaves ni comprensivas porque “se les suben a la chepa”. Ellas en cambio prefieren continuar así porque su experiencia les dice que de esta forma es más fácil establecer relaciones de confianza con el alumnado.
- Cuando un alumno o alumna tiene problemas en clase y hay que llamar a la familia, no es habitual que se utilice el mismo lenguaje cuando acude sólo la madre o cuando acuden madre y padre. Un profesor contaba en un curso que prefería hablar con las madres porque le resultaba más fácil llegar a acuerdos con ellas; añadía que algunos padres acudían cuando ya las cosas no tenían solución y por eso las conversaciones con ellos solían ser muy difíciles.
En muchas ocasiones las visión de la realidad de hombres y mujeres es diferente
Fuente: Instituto de la mujer. La salud laboral de las mujeres (2006)
- A la hora de enfrentarse a su primera entrevista de trabajo, Carlos y María están preparando su currículum y las respuestas a posibles preguntas. Carlos se centra en sus estudios y en sus aspiraciones. María se prepara además una serie de respuestas relacionadas con su vida personal que piensa que es muy probable que le hagan.
Las situaciones anteriores colocan a mujeres y hombres en posiciones muy diferentes a la hora de afrontarlas. Cuando hablen sobre ellas también lo harán de manera distinta puesto que su percepción y sus vivencias no han sido las mismas. Por ello, en muchos casos la visión que tienen los chicos y los hombres de una determinada realidad, no coincide totalmente con la que puedan dar las chicas o las mujeres.