1/ Introducción a la prensa digital
Historia
Antecedentes
A finales de los setenta del siglo XX, mucho antes de la masiva entrada de los ordenadores y de las nuevas tecnologías de la información en la sociedad, los medios de comunicación tradicionales (prensa, radio, televisión) acaparaban y distribuían los contenidos informativos.
En los ochenta aparecieron los primeros soportes y servicios de las llamadas nuevas tecnologías. Los satélites, los computadores, el fax, el minitel, el audiotex, el videotex o el teletexto significaron un primer avance en la difusión de las noticias.
El videotex y el teletexto ya pertenecen a la telemática, nombre técnico que apareció por primera vez en el Informe sobre la informatización de la sociedad, escrito por Simon Nora y Alain Minc (1978). Ambos sistemas pueden considerarse los primitivos periódicos electrónicos.
El teletexto nació unos años antes, en 1971, con la programación de notas informativas insertadas en las líneas que no usaba la televisión. A principios de los ochenta los editores alemanes solicitaron que el teletexto fuera considerado como un tipo de distribución electrónica de prensa y por eso pidieron que se le llamara ‘diario en pantalla’.
En España, el teletexto fue puesto en marcha en mayo de 1988. Desde su origen, este medio se define como periódico electrónico que se transmite usando la televisión. Pero tanto teletexto como videotex, avances importantes, no fueron vistos por la prensa tradicional como rivales que pudieran desplazarla o sustituirla.
Internet, en cambio, sí que ha sido contemplado como un indiscutible competidor de la prensa escrita. Puede consultarse el estado de la cuestión en el ameno libro La prensa sin Gutenberg (Fogel y Patiño, 2007).
El videotex es un medio que nació a principios de los setenta, en 1973, cuando el British Post Office (BPO) desarrolló un sistema que conjugaba el uso de la televisión con el cable del teléfono. Los usuarios sólo tenían que adquirir un pequeño adaptador de bajo precio.
Este nuevo soporte recibió primero el nombre de Viewdata y, ya en 1979, fue implantado plenamente con el nombre de Prestel, acrónimo en inglés de prensa telefónica, o por medio del teléfono. En marzo de ese mismo año se difundió por primera vez el Viewtel 202, como complemento por cable telefónico y televisión del periódico inglés Birmingham Post and Mail.
El Viewtel 202 fue el primer teleperiódico en soporte electrónico que se publicó o transmitió en todo el mundo. Funcionaba durante doce horas al día, de lunes a sábado y las notas que llenaban sus páginas incluían no sólo noticias, sino también otros contenidos informativos y de entretenimiento. Incluso dio cabida a los concursos, como sigue sucediendo en el teletexto.
Pese al progreso que el videotex significó en la comunicación telemática fue considerado como un rotundo fracaso por sus bajos números de audiencia y proveedores de información. Fueron causa de su fracaso su deficiente infraestructura y la percepción de los diarios ingleses más poderosos (Financial Times y The Economist, entre otros) de que el nuevo soporte representaba, por primera vez en la historia, un competidor (Meso, 2006:91).
En Francia, por el contrario, su versión del videotex, el Minitel, fue un completo éxito, debido a numerosas razones. El Informe sobre la informatización de la sociedad de Nora y Minc, nacido a instancias del Presidente Giscard d’Estaing, es el reflejo de un ambicioso plan para ponerse a la altura de los países más desarrollados en estos campos. Al igual que había sucedido en Inglaterra, algunos periódicos franceses entraron en el mercado de la provisión de noticias para el videotex, como Libération en 1984.
Menú principal de videotext del Education Department of Western Australia
http://www.ascilite.org.au/ajet/ajet1/hosie.html
El éxito en el número de suscriptores de Minitel no puede esconder sus carencias. Éstas provenían de lo anticuado del sistema de transmisión de datos y de que los canales que los emitían no eran ordenadores personales, sino terminales mudas, hecho este que dificultaba el procesamiento de la información.
Los países más avanzados (Alemania, Suiza, Holanda, Suecia, Japón, Canadá…) acogieron también la experiencia en el uso del servicio del videotex, con resultados parecidos al de Inglaterra. El caso de EEUU es peculiar porque, en un principio, existía prohibición por ley del suministro de contenidos informativos a las compañías de teléfonos, con lo que se frenó la primera expansión de una versión de videotex.
A pesar de todo, se implantó como servicio comercial en 1979 con el nombre de The Source. Los pocos suscriptores, al igual que en el caso inglés, resaltan en cifras el fracaso del videotex, a pesar de sus claras ventajas interactivas (envío de correos electrónicos, lectura de noticias de última hora, concursos…).
En España, la primera transmisión a través del videotex se hizo con motivo del Mundial de Fútbol de 1982. En nuestro país ésta es precisamente la época en la que se vivió el paso del periodismo tradicional a la fase del llamado "periodismo electrónico", es decir, el que usa un soporte electrónico (discos magnéticos, discos ópticos…).
Supuso además un avance en los proyectos de investigación técnica y periodística mediante el videotexto –en España se llama Ibertex–, el teletexto, el teleperiódico, el audiotext, el periódico enviado mediante un fax, el NewsPad o los proyectos de las compañías Xerox y 3M en la posible creación y diseño de un futuro papel electrónico.
Algunas experiencias, como la del periódico por fax no prosperaron en España, mientras que otras, como el teletexto, que aún mantienen TVE, las televisiones privadas y autonómicas, se han revelado como un auténtico éxito, porque muchas personas las usan día a día para obtener todo tipo de informaciones.